¿Alguna vez nos hemos detenido a pensar en lo afortunados que somos, pero a la vez, lo desagradecidos que somos? Si, somos desagradecidos… Desagradecidos con Dios principalmente, porque nos regala el don de la vida, sabiendo que muchos no pudieron vivir mas allá de sus primeras horas sobre esta tierra, debido a desnaturalizadas mujeres, quienes por una u otra razón egoísta les arrebataron sus alientos siendo aun pequeñas e indefensas criaturas. Desagradecidos con Dios, porque nos regala habilidades que damos por sentadas, pero que al compararnos con otras personas, nos damos cuenta de cuan importantes son. Un ejemplo de ello es el hecho de poder sentarnos y levantarnos a nuestra voluntad. Incluso, en los estadios jugamos con ello al hacer la famosa “ola”, poniéndonos de pié y levantando los brazos y luego sentándonos al pasar la ola. Pero este hombre, sufrió un accidente temprano en su vida que le destruyó su pelvis, dejándole incapaz de doblar su columna vertebral, de f...
Fotos, Música y algo que decir