"Buenos días Señor" - le dije a Dios en oración, a lo que El respondió en silencio, pero posando suavemente su mano en mi cabeza, dándome una sensación de calor y sublime amor.
Tristemente cargado por diversas circunstancias, le dije: "Señor, ¿quién soy para tí?"
El respondió con una voz suave, pero con firmeza: "No temas, porque yo te redimí; te puse nombre: mío eres tu!!" (Isaías 43:1)
En mi terquedad, volví a hablar: "Entiendo, pero ¿que significo para tí?"
El, como un padre amoroso, me abrazó fuertemente y me dijo: "MI HIJO eres tú,
Yo te he engendrado hoy" (Hebreos 1:5) además, "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna" (Juan 3:16) y también: "Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida" (Isaías 43:4)
Entendiendo entonces lo que significa mi vida para El, ya no le pregunté mas al respecto, sino que quedé un rato absorto en su presencia.
Luego, recordé delante de Dios aquellos sueños, proyectos, planes y anhelos que, a mi juicio, El nunca respondió.
El me dijo: "echa toda tu ANSIEDAD sobre mi, porque yo tengo cuidado de ti" (I Pedro 5:7) y me hizo recordar todas las bendiciones que ya me había dado, y que cuando lo creí ausente, El estuvo conmigo; cuando creí que no podía seguir mas y que me faltaba todo, el alimento nunca faltó en mi casa y nunca faltó un techo sobre mi cabeza. Entonces, me dijo: "Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la MISERICORDIA a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones" (Deuteronomio 7:9)
Fue entonces cuando comprendí lo pequeño que soy ante su incomparable amor.
Le dije: "Dios mío, cuán grande es tu amor!! ¿Cómo puedo yo pagarte?
El me respondió con tres simples, pero poderosas afirmaciones:
"Amarás al SEÑOR TU DIOS con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente" (Mateo 22:37)
"Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces" (Jeremías 33:3)
"Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; PERMANECED en mi amor" (Juan 15:9)
Después de escuchar sus palabras y meditar en ellas, con lágrimas inundando mis ojos, le dí gracias, y recordando también las escrituras le dije a El:
"Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar"
Después de esto, me levanté de mis rodillas con los ojos inundados de llanto, pero con mi corazón henchido de gozo y paz...de esa paz que sobrepasa todo entendimiento. Solo hasta entonces pude entender que todo estará bien, mientras tenga mi confianza puesta en Dios. Mi esperanza está puesta en El.
Y espero que la suya, mis estimados lectores, también lo pueda estar.
Tristemente cargado por diversas circunstancias, le dije: "Señor, ¿quién soy para tí?"
El respondió con una voz suave, pero con firmeza: "No temas, porque yo te redimí; te puse nombre: mío eres tu!!" (Isaías 43:1)
En mi terquedad, volví a hablar: "Entiendo, pero ¿que significo para tí?"
El, como un padre amoroso, me abrazó fuertemente y me dijo: "MI HIJO eres tú,
Yo te he engendrado hoy" (Hebreos 1:5) además, "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna" (Juan 3:16) y también: "Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida" (Isaías 43:4)
Entendiendo entonces lo que significa mi vida para El, ya no le pregunté mas al respecto, sino que quedé un rato absorto en su presencia.
Luego, recordé delante de Dios aquellos sueños, proyectos, planes y anhelos que, a mi juicio, El nunca respondió.
El me dijo: "echa toda tu ANSIEDAD sobre mi, porque yo tengo cuidado de ti" (I Pedro 5:7) y me hizo recordar todas las bendiciones que ya me había dado, y que cuando lo creí ausente, El estuvo conmigo; cuando creí que no podía seguir mas y que me faltaba todo, el alimento nunca faltó en mi casa y nunca faltó un techo sobre mi cabeza. Entonces, me dijo: "Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la MISERICORDIA a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones" (Deuteronomio 7:9)
Fue entonces cuando comprendí lo pequeño que soy ante su incomparable amor.
Le dije: "Dios mío, cuán grande es tu amor!! ¿Cómo puedo yo pagarte?
El me respondió con tres simples, pero poderosas afirmaciones:
"Amarás al SEÑOR TU DIOS con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente" (Mateo 22:37)
"Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces" (Jeremías 33:3)
"Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; PERMANECED en mi amor" (Juan 15:9)
Después de escuchar sus palabras y meditar en ellas, con lágrimas inundando mis ojos, le dí gracias, y recordando también las escrituras le dije a El:
"Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar"
Después de esto, me levanté de mis rodillas con los ojos inundados de llanto, pero con mi corazón henchido de gozo y paz...de esa paz que sobrepasa todo entendimiento. Solo hasta entonces pude entender que todo estará bien, mientras tenga mi confianza puesta en Dios. Mi esperanza está puesta en El.
Y espero que la suya, mis estimados lectores, también lo pueda estar.
Simplemente precioso !!
ResponderEliminarAsí de fácil es, lástima que nos cuesta entender
ResponderEliminarEs correcto. Gracias a Dios, ahora lo podemos entender
Eliminar